El mundo del posicionamiento (o si lo preferís SEO) tiene un montón de caminos para llevarlo a cabo. Y para cada camino existe una expresión con las que antes o después nos acabamos topando si profundizamos en esto del marketing online y el posicionamiento en buscadores. En esta ocasión nos gustaría hablaros un poco del Link Baiting.
Tras esta expresión tendríamos lo que se viene a traducir como “enlace cebo”. Se trata de una estrategia de SEO donde se trata de crear contenidos que estén enfocados a ser enlazados.
¿Dónde está el link baiting dentro de todo esto del posicionamiento?
¿Has dicho ser enlazados? ¿Pero acaso no es ese el objetivo de cualquier estrategia de SEO, conseguir enlaces que mejoren el posicionamiento? Sí y no. Veamos. Está claro que persigue el mismo objetivo que por ejemplo una estrategia de contenidos, no en vano es una técnica propia de SEO. Pero hay una sutil diferencia, y es que mientras que en la estrategia de contenidos los artículos se desarrollan pensando únicamente en el contenido que se quiere exponer, cuando hacemos link baiting lo que hacemos es redactarlo con el fin de generar esos ansiados backlinks y no nos centraremos en el contenido. Es parecido pero no es lo mismo.
Espera, espera, ¿no es esto parte del linkbuilding? No confundamos cosas, el link building consiste en buscar formas de insertar enlaces en otras páginas que apunten a la nuestra. En el link baiting hablamos de como redactar el contenido para que sean otros los que nos enlacen. Y es que hacer SEO es una tarea bastante compleja y dinámica, donde debemos estar siempre atentos a las novedades que imponen los buscadores y donde estos están cada vez más atentos cuando se trata de detectar enlaces creados de forma “artificial” (esto es algo en que se cae confiando en linkbuilding como estrategia principal). Así pues, conseguir que sean otros los que añadan esos enlaces es nuestro objetivo real.
¿Pero eso no lo buscábamos con una estrategia de contenidos? También. Es indudable que un buen contenido acabará por ser enlazado desde otras páginas web, pero y ¿qué pasa si buscamos alguna forma de darle una vuelta de tuerca a ese contenido y hacerlo más atractivo a otros usuarios para que lo enlacen? Pues entonces estaríamos traspasando ligeramente la frontera del marketing de contenidos para recurrir al link baiting.
Y es más, podríamos escribir nuestro contenido pensando únicamente en eso, en lograr captar la atención de otros y de esa forma que el artículo consiga muchos enlaces entrantes de forma rápida. Pero está claro que para ello tendremos que desarrollar un contenido que pueda ser de interés para que luego sea enlazado. ¿Estamos regresando de nuevo a la estrategia de contenidos?
¡Que cacao! En parte sí, pero la gran diferencia es que con el marketing de contenidos no solo buscamos atraer el enlace, sino que normalmente su finalidad va un paso más allá, tratando de fomentar la creación de marca personal y la conversión, mientras que en el link baiting nos estaríamos quedando más en la parte de atraer el enlace y el tráfico. Pero esos artículos que atraerán tráfico, deberían tener incluidos los convenientes enlaces internos que “quizás” permitan dar un paso más allá a los usuarios y llegar a otros contenidos internos de nuestra web.
Cuando nos centremos en el contenido estaremos pensando más en los usuarios que vayan a consumirlo, mientras que cuando estemos empleando link baiting estaremos un poco más centrados en otros webmasters o influencers que sean los que puedan acabar enlazando nuestro contenido. ¿Pero los usuarios finales también pueden compartir y enlazar?
De nuevo diría ¡que cacao! Pero no… con esto lo que queda patente es que el link baiting no es algo excluyente, sino que debe emplearse en su justa medida como complemento a otras técnicas. Así pues cuando redactamos un artículo deberíamos estar pensando tanto en nuestro target de usuarios como en otros webmasters. Ambos son potenciales grupos que pueden acabar enlazando nuestros artículos. Y es que no lo olvidemos, a veces puede suceder que un buen contenido no sea tan eficaz a la hora de compartirse si no se añade una pizca de sal, y el link baiting puede ser perfectamente esa pizca de sal.
Ahora bien ¿Cómo se ponen esos cebos?
No existen reglas escritas, porque no lo olvidéis nuestro objetivo en este caso no son robots ni máquinas que trabajen de forma automatizada, sino que serán personas que están detrás de otras páginas.
Por tanto aquí solo cabe que pensemos en el artículo y nos preguntemos ¿lo enlazaría yo si fuese de otro? O ¿aporta algo más de lo que ya se sabe? Si obtenemos un si a estas preguntas, vamos en el sentido correcto. Luego queda emplear una redacción que sea capaz de captar la atención emocional y así tener más posibilidades de ser enlazados (de nuevo recordar que son personas las que aportarán el éxito o no de esta estrategia).
Quizás sin darte cuenta ya lo hacías, pero ahora que ya lo sabes no tienes disculpa si te dicen que tus artículos son muy sosos y por eso no los comparten. El link baiting puede estar en muchas partes de forma silenciosa, pero sin duda si sabes aprovecharlo adecuadamente, conseguirás mejores resultados en tu estrategia de posicionamiento.