Los tiempos cambian, para bien o para mal. Y es necesario adaptarse a los cambios o sucumbir ante ellos. Eso en Microsoft lo saben bien, puesto que a lo largo de la historia de la tecnología, han visto como el mundo evolucionaba y han ido adaptándose para lograr mantenerse en un puesto bastante privilegiado… al menos hasta ahora.
Los últimos tiempos han pillado bastante a contrapie a la gran compañía de software de Redmon. La irrupción del mundo movil con las tablets y smartphones y el cloud computing (al menos en el sector doméstico) han superado las previsiones de los de Microsoft que ahora se encuentran en una carrera por no perder el tren definitivamente. Por suerte para ellos, han sabido coger el toro por los cuernos y parecen bien enfocados en muchos de esos cambios (en otros quizás no tanto).
Pero ahora parece que les surge un nuevo caballos de batalla… el de los sistemas operativos gratuitos. Sin duda, una de las principales fuentes de ingresos ha sido hasta ahora la venta de licencias de Windows a los fabricantes de ordenadores. Sin embargo, el mercado actual de ordenadores ha perdido gran parte de su peso. Además, de la competencia que suponen las tablets (donde tanto iOs como Android son opciones «gratuitas»), en los sistemas operativos para ordenadores sus dos principales competidores Linux y OSX son opciones gratuitas. En el caso de Linux ha sido así de forma histórica, y en el caso de OSX, Apple ha ido reduciendo de forma progresiva los precios, hasta el lanzamiento de su última versión OSX 10.9 Mavericks que llegaba de forma gratuita para todos los usuarios que lo quisiesen. Este fue sin duda el torpedo final, que obliga a Microsoft a replantearse completamente su estrategia de venta de licencias.
En los últimos tiempos, Microsoft ya ha realizado esfuerzos considerables reduciendo el precio de sus licencias de Windows para equipos de gama baja, donde es imprescindible competir arañando hasta el último céntimo. También se ha comentado la posibilidad de que Windows 8 RT y Windows Phone se lanzasen de forma gratuita. Pero ¿como va a perder Microsoft una de sus principales fuentes de ingresos?
Replanteando la situación
Sin duda, en estos momentos Microsoft tiene en mente todo esto en la cabeza. Y saben que deben cambiar la situación, que posiblemente les obligará a reducir el precio de las licencias aún más, incluso llegando a tener que ofrecerlas de forma gratuita. Esto requiere sin duda un cambio en la mentalidad, Windows ya no sería el producto final, sino un servicio intermedio…. pero ¿de donde obtener el dinero que se dejaría de ingresar por las licencias de Windows?
En Microsoft hay cada vez más una filosofía de pagar por lo que se usa. Así, servicios como Office365 llegaron para demostrar que un sistema de pago por uso podían ser efectivos. Sin lugar a dudas, parece que Office es a día de hoy el principal candidato a convertirse en el nuevo puntal para afianzar los ingresos de Microsoft si finalmente deben reducir los precios de Windows (aunque cuidado con la competencia que suponen servicios como los ofrecidos por Google en ese sentido). También están ahí el siempre vilipendiado Bing, o la XBox y sus múltiples servicios asociados…
Seguro que en años venideros veremos cambios en este sentido… pero lo que está claro es que Windows podría no volver a ser nunca el rey que fuese y eso en Microsoft lo saben.
