¿Hay alguien ahí? o lo difícil que es contactar con el soporte de algunos servicios online

Cada día que pasa son más y más los usuarios de algún servicio online. Correo electrónico, redes sociales son algunos de esos servicios pero también aplicaciones online o servicios de almacenamiento. Y cada vez es mayor la dependencia que tenemos de esos servicios online, cada vez es más importante su uso. Y nos hemos planteado alguna vez ¿que pasa si perdemos el acceso a dichos servicios? ¿Que pasa si no podemos recuperar el control de nuestras cuentas por los métodos que nos ofrecen los distintos servicios? La verdad es que en ese momento, podemos empezar a temblar, pues es ardua como poco la tarea a la que nos tendremos que enfrentar. Y es que una vez comprobado que las opciones online que nos ofrecen no funcionan, pensaríamos que obtendríamos acceso a un teléfono de contacto que nos lleve a un operador que nos solucione el problema rápida y amablemente (como cuando uno llama a por ejemplo su operadora y espera hasta que le transfieren la llamada a un operador). Pues bien, con los servicios online, la cosa no es así, o al menos no es tan fácil.

Y es que aparte de las soluciones que se ofrecen online, pocas vias más de contacto son las que están a nuestra disposición. Seguramente a muchos les parezca algo injusto, pero es muy cierto que todas estas compañías cuya gran masa de usuarios en muchos casos son usuarios que no pagan nada por el servicio, tienen que optimizar recursos al máximo, así pues la opción de soporte telefónico pocas veces es contemplada. Acaso no os habéis planteado el coste que puede acarrear tener un soporte técnico, que debe contemplar varios idiomas, sin duda para estas empresas no es una opción viable, así que nos remiten siempre a las soluciones online. ¿Acaso no es esa su filosofía? Compañías nacidas en internet para dar servicios online y que ofrecen soluciones online.

Por suerte, cada vez son más las medidas para que podamos mantener a buen recaudo nuestras cuentas, pero a veces usuarios inexpertos o desconocedores de muchas de esas opciones no tienen tanta suerte y al final son víctimas de robos de cuentas y como hemos dicho, la solución en esos casos no suele ser muy positiva. Así pues, recordarlo, extremar vuestras opciones de seguridad y os ahorraréis sustos desagradables intentando contactar con el soporte de estos servicios online.

¿Pueden las nuevas leyes de protección de datos llevar a que se cobre por servicios online gratuitos?

La verdad es que hoy en día, la privacidad de los datos de los usuarios se ha convertido en un estandarte para la justicia y cada vez hay más propuestas cuyo objetivo es asegurar la privacidad de los datos personales. ¿Pero que consecuencias podría tener un endurecimiento de estas leyes? Veamos, muchos de los servicios online que hoy en día usamos, y de forma gratuita, como pueden ser Facebook o GMail se basan su modelo de negocio en la publicidad. Nosotros cedemos nuestros datos y a partir de estos, nos ofrecen publicidad con las cuales se financias los servicios.

Pues bien, la Comisión Europea está planteando aumentar los requisitos para solicitar el consentimiento de uso de los datos por parte de los usuarios y además limitar la capacidad de las compañías para utilizar y vender luego datos como podrían ser nuestros hábitos de navegación a empresas de publicidad (las cuales luego les proporcionan el dinero con el que financiar el servicio). Si no se cumpliesen los requisitos, las compañías podrían verse acosadas por multas que podrían oscilar entre el 0,5 y el 0,2% de la facturación anual (que puede ser una cantidad bastante importante). También hay empresas que ya han manifestado ciertas reticencias al respecto de otro aspecto de la propuesta de ley, el denominado «Derecho al olvido», esto es la posibilidad de eliminar completamente los datos de forma definitiva sin que el servicio se quede con dato alguno.

Otro de los elementos de la propuesta de ley que preocupa a las empresas de intenet es lo que se ha denominado“Derecho al olvido”, o lo que es lo mismo, el derecho a eliminar completamente los datos de un usuario que así lo desee, sin que la empresa retenga ninguno. En este caso las empresas de Internet tendrían que ponerse en contacto con las compañías a las que hubieran transferido estos datos para asegurarse que el borrado de los mismos es total.

Facebook y GMail ya han presentado sus desacuerdos con estas propuestas según se recoge en fuentes como The Guardian lo cual puede llevarnos a plantearnos la pregunta que abría el post ¿puede llegar un momento en que Facebook, GMail o servicios similares sean de pago? Está claro que su modelo actual basado en la publicidad podría verse perjudicado, así pues si se estrangulase dicha fuente de ingresos, ¿que opción elegirían para monetizar sus plataformas? Facebook ya ha mostrado en varias ocasiones que están explorando diversas posibilidades, como el hecho de que los usuarios paguen por enviar mensajes a usuarios que no estén en su lista de amigos (en el caso de querer escribir al propio fundador de la red social, esa cifra se habría establecido en 100$).