Aunque se esperaba que la llegada de Windows 10 lograse detener la sangría que está experimentando el mercado de PCs, lo cierto es que su impacto no ha sido tan balsámico como se esperaba. Y es que en el tercer trimestre las ventas de PCs han seguido cayendo, reduciéndose en un 7,7% con respecto al año anterior en este mismo trimestre (según datos de la consultora Gartner).
Lenovo ha logrado mantenerse en el primer puesto con algo más del 20% de cuota, por encima de HP que supero el 18% de cuota y del con más del 13%. En cuarto lugar se encuentra Apple con más del 7% y siendo la que más logra crecer (frente a los descensos de la mayoría de los demás fabricantes).
Así pues, como decíamos, el impacto de Windows 10 parece haber tenido un mayor efecto sobre el parque existente de ordenadores que han realizado una adopción masiva, y que no ha tenido gran impacto en las ventas de nuevos equipos que si se espera se note en el periodo de navidades.