Recientemente ha trascendido como Google se ha negado a aceptar las condiciones que le imponía Facebook a la hora de poder ofrecer aplicaciones que muestran publicidad contextual. En dichas condiciones se incluye la clausula que impide a terceras empresas hacer uso de los datos de sus usuarios, algo que claramente va en contra de los intereses de Google y que no es sino una forma de evitar que terceros puedan hacer caja sin pasar por la «gestión» de Facebook. Pero la cosa no se queda ahí, pues en la red se ha levantado cierto revuelto con este tema y es que se generan dudas en cuanto a la posibilidad de trasladar las campañas de publicidad de una plataforma ampliamente conocida como es la de Google a una donde todavía hay que aclarar muchos temas.
Lo que está claro, es que Facebook ha conseguido una posición bastante privilegiada y desde esta tratarán de explotarla al máximo, ahora es cuestión de ver en que quedan las cosas.