Cuando arranca un nuevo año muchos son los que lo empiezan con propósitos de mejora. Pues bien, para los que queráis hacer que vuestras búsquedas en Windows 10 sean aún un poco más rápidas, os vamos a explicar como hacerlo.Si bien es cierto que con Windows 10 se ha producido un salto enorme en cuestión de búsquedas dentro del sistema operativo de Microsoft, aún hay una forma de mejorar un poco más la velocidad de las búsquedas.
Porque si, con Windows 10 llegó la indexación para hacer que de buenas a primeras buscar cosas por ejemplo en el renovado menú de inicio fuese algo realmente rápido. De la misma forma, esa indexación contribuye a que las búsquedas que efectua cortana o que hacemos en las carpetas de archivos sean más rápidas de lo que nos tenía acostumbrado el sistema operativo de los de Redmon.
Bien, pues vamos a explicaros como podéis ganar aún un poco más de velocidad cuando de buscar cosas dentro de vuestro ordenador se trata. Para ello tenéis que acudir al Panel de Control y allí encontraréis Opciones de indización (también podéis escribir directamente en el menú de inicio Opciones de indización y en un periquete deberíais ver la opción para abrirla). Al abrirla se nos muestra una ventana donde veremos que ubicaciones se están indexando por defecto en nuestro ordenador.
Así pues lo normal sería que tengamos nuestra carpeta de usuario indexada y algunos directorios más como es por ejemplo el propio Menu de Inicio. Bien, pues vamos a buscar en la parte inferior el botón Opciones avanzadas y allí iremos a la pestaña Tipos de archivo. Entonces se nos mostrará una lista de todos los tipos de archivos que se indexarán por su extensión y es ahí donde podremos trastear un poco para intentar mejorar la velocidad de las búsquedas.
Y es que quizás no necesitemos que nuestro Windows indexe algunos tipos de archivos de forma que al omitirlos, las búsquedas serán aún un poco más rápidas. De esta forma, podríamos ir desactivando tipos de archivos hasta quedarnos con aquellos tipos de archivos que a nosotros nos interesen. El abanico de extensiones es muy amplio y quizás no sepáis exactamente cuales quitar y cuales no, pero si usais un poco la orientación del icono que aparece en cada extensión podréis saber si puede que os interese desactivar esos archivos o no (y por ende aquellos que aparecen sin programa asociado podéis desactivarlos). Así si hacéis uso básicamente de archivos de word y de imágenes, podría bastar con dejar unas pocas extensiones: .doc , .docx , .jpg , .jpeg y el resto las podríais eliminar. Pero como decíamos no hay una regla exacta para ver cuales quitar o no, aunque por ejemplo podríamos deciros que desactivar las extensiones .dat o .db no debería interferir en vuestro funcionamiento habitual y si contribuir a reducir el índice (mejorando así el rendimiento al tener que buscar en un número menor de registros). En las opciones de indización se indica cuantos elementos están indizados y cuando hagáis el cambio, la idea es que ese número de elementos se haya reducido sensiblemente.
Lo bueno de todo, es que en caso que creáis que algo no va del todo bien, solo tenéis que volver a recurrir a estas indicaciones para volver todo a su estado original. Y un último apunte, una vez hagáis los cambios, Windows tendrá que reconstruir su índice para las búsquedas por lo que hasta que esta acción no se haya llevado a cabo el rendimiento en este sentido podría verse mermado.