Las telecos llevan mucho tiempo reclamando la posibilidad de imponer un pago adicional a las compañías que requieran de un acceso más rápido a Internet, pero hasta ahora esta se les había estado resistiendo. No obstante, parece que en Estados Unidos las cosas podrían estar cambiando poniendo en peligro el principio de «neutralidad de la Red» según el cual todos los contenidos deberían circular a igual velocidad en Internet. Y este cambio podría venir propiciado por una sentencia judicial a favor de Vericon que había demandado a la Comisión Nacional de Comunicaciones (FCC por sus siglas) de Estados Unidos precisamente por haberle prohibido el establecer diferentes velocidades de descarga.
De esta forma, las compañías de telecomunicaciones estarían en disposición de ofrecer una mayor velocidad a las empresas que realmente necesiten de grandes velocidades (como pueden ser servicios de Streaming del estilo de Netflix), eso si siempre tras el pago de un canon adicional. De llevarse adelante un cambio de este calado, el mundo online podría verse sacudido de los pies a la cabeza. Y es que internet estaría frente a un posible cambio, ya que aquellos servicios que estén ofrecidos tras el conveniente pago podrían gozar de preferencia por encima de otros. Esto podría llevar a quienes ofrecen este tipo de servicios a cobrar por ellos en aras de poder ofrecer esa mejor conexión. Las grandes compañías podrían no tener problemas para asumir un nuevo formato como este, pero ¿y las más pequeñas?
Con este nuevo paradigma podría estar favoreciéndose a esas compañías más grandes que si podrían pagar por ofrecer unos servicios de más calidad, aunque claro está ¿a que coste? Es mas, si estas no trasladasen los costes adicionales a los usuarios ¿podrían seguir manteniendo los márgenes de beneficios? ¿No trasladarían a los usuarios esos costes adicionales? ¿Que harían compañías como Google, Facebook? ¿Se vería afectada la estrategia de los proveedores de servicios de almacenamiento en la nube?
Un cambio en este sentido, generaría sin lugar a dudas multitud de incógnitas, aunque por el momento esto es algo que en otras partes parece que es más lejano, ya que en algunos países como Brasil u Holana ya se voto a favor de la neutralidad en la red ¿Será Estados Unidos el primero en ir a contracorriente en este terreno? ¿Le seguirán otros después?