AdBlock es una extensión que de un tiempo a esta parte está muy popularizada entre los usuarios. Surgió en un tiempo en que los popups aburrían constantemente a los usuarios, pero que ha ido evolucionando para evitarnos la «molesta» publicidad que llena muchas páginas.
Pero no debemos olvidar que la publicidad es la principal fuente de ingresos de muchos servicios y que por tanto, estos no ven con buenos ojos su proliferación. Y la demostración de que esto es así ha sido el reciente incidente con AdBlock y Youtube. Y es que de la noche a la mañana, los usuarios que tenían instalado AdBlock en sus navegadores han visto como al acceder al portal de Youtube no solo no se bloqueaban los vídeos de publicidad, sino que los usuarios tenían que visualizar vídeos de 3 minutos de duración (toda una eternidad sin duda) de forma obligatoria.
Este «incidente» que ha llenado las redes sociales y los foros con quejas de los usuarios de la extensión, parece que solo afectaba a los usuarios de Chrome, quienes desinstalando la app de Youtube del navegador deberían poder solucionar el problema. Ahora bien, sin duda, esto abre un importante debate al respecto de la publicidad y los servicios gratuitos basados en esta. Y es que si los usuarios deciden instalar extensiones del estilo de AdBlock que bloquean la publicidad, esta puede no ser rentable para los anunciantes, y por consiguiente los ingresos de publicidad que facilitan este tipo de servicios gratuitos caerían. Esto llevaría sin duda a un replanteamiento del servicio incapaz de financiarse por esta via. De ahí que cada vez más, los servicios que hasta ahora eran gratuitos empiecen a ofrecer modalidades de pago, las cuales proporcionen una fuente de ingresos más segura.
Ahora bien ¿hasta que punto está bien que se penalice a los usuarios por utilizar este tipo de extensiones como ha sucedido en el reciente caso de Chrome-YouTube-Adblock? ¿No sería más lógico un movimiento para eliminar la extensión del navegador que esta penalización?