Redes sociales, redes sociales, redes sociales… así hasta la saciedad. En todas partes se habla de las redes sociales, todos quieren estar (¿cuantas veces hemos tenido que decir esto ya?), estas ayudan a tu estrategia online…. Vamos, que parece que hoy en día las redes sociales son la panacea y que son una piedra angular para prácticamente cualquier proyecto online.
Y estudio tras estudio, no hacen sino confirmar y dar más importancia a estas redes sociales, con especial frecuencia al respecto de Facebook. Un reciente estudio de GoDigital, realizado en Estados Unidos revelaría que el 62% de los usuarios harían uso de esta red social para informarse de las empresas o negocios antes de visitarlas o de interesarse sobre un producto. Las demás redes sociales quedan en un segundo plano, quedando la red social de Zuckerberg como la más importante.
Pero debemos tener mucho cuidado, y no descuidar nuestra propia página web. Cierto es que las redes sociales permiten una rápida y económica puesta en marcha de muchas iniciativas, pero debemos tener mucho cuidado, pues estas se apropian de todo el contenido que vertemos en ella y ¿quien nos asegura que en el futuro las cosas no cambien y cambien las reglas de estas redes sociales? El poder que adquieren las redes sociales, además de convertirlas en un poderoso aliado, las convierten en un aliado que puede convertirse en dueño y señor, exigiéndonos como debemos actuar o no.
Así pues, no dejéis que vuestro proyecto online, deje recaer todo su peso sobre las redes sociales. Estas son sin duda un importante punto de apoyo, pero no el único, y tener el control de lo que hacemos es la mejor forma de asegurar que podemos llevar el rumbo de nuestro proyecto como queremos.
No pongas todos los huevos en la misma cesta
¿Quien no ha escuchado esto alguna vez? Está claro que como decíamos antes, no debemos centrarnos en una sola plataforma. Las redes sociales están ahí, nuestro propio sitio web también, los buscadores son otro elemento clave, y habría otras muchas formas de hacernos visibles en el mundo online. Y sin lugar a dudas no debemos descuidar ninguna, puesto que hacerlo podría abocarnos a un fracaso en caso que las reglas del juego cambien. Porque, si de pronto Google cambia su algortimo y era nuestra única fuente de visitas, ¿que haremos?
Es importante diversificar nuestras fuentes de visitantes, de forma que en caso que alguna de ellas fracase, las otras puedan compensar esa pérdida. Por tanto, no debemos dejar de explorar todas las posibilidades que hay a nuestro alcance, de la misma forma que no debemos centrarnos en una en exclusiva.