Aunque pueda sorprender a muchos, Microsoft tras adquirir Nokia anunció que tendrían terminales que utilizasen Android como sistema operativo en lugar de su propio sistema, Windows Phone. ¿No es esto tirar piedras contra su propio tejado? Podría parecer que si, pero la intención de Microsoft y esta línea de terminales Nokia (que ya sería la segunda versión) trata de ser un punto de entrada al ecosistema Microsoft más que otra cosa. Se trata de terminales de perfil más bajo, que tratarían de «enganchar» al usuario con una experiencia Nokia y cuando luego el usuario quiera seguir avanzando en esa «experiencia Nokia» acabar por optar por un terminal basado en Windows Phone… al menos esa es la intención.