Un tiempo atrás, una sentencia impedía a Apple usar la marca iPhone para su reconocido smartphone en Brasil en beneficio de la compañía local IGB Electrónica (anteriormente conocida como Gradiente) que había solicitado el uso de dicho nombre siete años antes del lanzamiento del exitoso dispositivo de Apple, en el año 2000. De hecho, la compañía había lanzado a finales de 2012 un dispositivo bajo el nombre iphone (debe notarse que usaron la «pe» en minúscula) que estaba gobernado por Android.
Apple, no contenta con el resultado dictaminado por el Instituto Nacional de la Propiedad Intelectual de Brasil, que había dado la razón a Gradiente, decidió apelar. Y finalmente, un juez ha obligado a anular la concesión exclusivo de la marca a Gradiente. La razón esgrimida por el juez es que el nombre de marca es mundialmente reconocido y que supondría un gran perjuicio para la compañía de Cupertino. Así pues, si no hay una subsiguiente apelación a esta decisión, finalmente Apple podrá llamar iPhone a sus iPhone.