El equipo de Microsoft ha desvelado las mejoras que traerá uno de los elementos fundamentales del sistema operativo Windows, el explorador de archivos. Según indican, el nuevo explorador de archivos es el resultado de mucho tiempo de análisis de uso del mismo gracias a la información de uso anónima recibida (si esas cosas que aceptamos cuando se instala Microsoft Windows y que nadie lee siquiera). Entre otras cosas se han dado cuenta que aproximadamente el 81% de las acciones realizadas se reducen a un grupo de 10 tareas, lo cual les ha llevado a unificarlas y mostrarlas de la forma más sencilla e intuitiva posible.
Para lograr sus objetivos, Microsoft ha implementado la interfaz Ribbon, que estrenaron con office 2007 y que paulatinamente se está convirtiendo en lo estandar para las aplicaciones de Microsoft. Y con esta se plantean tres claros objetivos:
- Optimizar el Explorador de Windows para tareas de gestión de archivos.
- Razionalizar la experiencia del usuario, colocando los controles de calidad en lugares intuitivos, organizados en grupos coherentes y exponiéndolos en escenarios contextuales cuando sea posible.
- Respetar el patrimonio Explorer. Traer de vuelta las características solicitadas de la época de Windows XP.
Con esto en la cabeza, en la pestaña de inicio se han incluido las tareas básicas de gestión de archivos, donde se incluirían ese grupo de comandos que representarían algo más del 80% de los utilizados habitualmente. El hecho, además de que traigan algunas características desechadas y que gustaban del vetusto XP, contribuye a pensar que Microsoft de verdad está haciendo bien las cosas. Sin duda, la nueva interfaz tiene muchas papeletas para convertirse en algo verdaderamente útil.
Y para terminar, siempre vale más una imagen que mil palabras: