Algo que he aprendido a lo largo de todos estos años trabajando con nuevas tecnologías es que no hay sistema que sea 100% inmune a la existencia de vulnerabilidades. Podemos decir que hay sistemas más seguros unos que otros, pero no hay realmente ninguno 100% seguro. Con esta premisa en la cabeza nos deberíamos lanzar cada día a utilizar nuestros smartphones, tablets u ordenadores.
Y si la seguridad es algo que nos importa realmente, y nos plantean la posibilidad de evitar la gran mayoría de vulnerabilidades diremos rapidamente: ¿y como hago eso? … ¿O no os lo preguntáis?
Pues bien, aunque parezca algo que suene un poco extraño, lo cierto es que es una medida que viene existiendo desde hace mucho tiempo, que pocos usuarios utilizan y que no requiere de verdaderos conocimientos de informática. Pero lo cierto es que solventa una gran mayoría de las vulnerabilidades que se detectan cada cierto tiempo en los sistemas operativos.
Sin más rodeos, ¿cual es esa solución mágica? Pues algo tan sencillo como utilizar un usuario sin permisos de administrador. Con ese simple gesto, podríamos «atenuar» los efectos de hasta el 94% de las vulnerabilidades que se detectaron por ejemplo en el año 2016 en Windows (tal y como se recoge en el informe de la compañía Avecto). Por desconocimiento, o por comodidad, esta medida pocos usuarios la llevan a cabo y sin embargo bastaría para reducir drásticamente cualquier posible efecto de una vulnerabilidad. Al no contar con permisos de administración, un malware tiene las cosas mucho más complicadas y por tanto solo en los casos de fallos de seguridad más graves estos pueden ir más allá aún sin permisos de administración.
La única pega, es que utilizar un usuario sin permisos de administración nos complica las cosas un poco cuando por ejemplo nosotros queremos instalar un programa, pero por lo demás todo son ventajas en cuanto a seguridad de nuestro equipo informático. Así pues, ya lo sabéis, si queréis estar más seguros, tenéis una solución al alcance de vuestra mano realmente sencilla y efectiva.