Hoy en día todo el mundo quiere estar en las redes sociales. Es una realidad que las redes sociales pueden ayudar mucho, pero también es cierto que si no se hace un buen planteamiento puede ser más contraproducente. Así pues tenemos que hacer un adecuado planteamiento para iniciar nuestra actividad en las redes sociales. De esta forma, lo primero que debemos decidir y que marcará el resto de nuestra estrategia en redes sociales es ¿que es lo que queremos conseguir? Cuales son nuestros objetivos con la presencia en las redes sociales. No tener un objetivo (u objetivos) concreto es como disparar sin apuntar, podemos acertar pero será solo de casualidad.
Una vez tenemos claro el objetivo, decidiremos que red social es la más adecuada. No debemos fijarnos solo en la cantidad de usuarios que cada una de las redes sociales dice atesorar. Lo que nos importa es el público que hay en cada uno y si este coincide con aquel al que pretendemos llegar con nuestra actividad en las redes sociales.
El siguiente paso que daremos será planificar los contenidos que publicaremos y cada cuanto tiempo lo haremos. Conviene tener claro este aspecto para lograr que nuestra actividad se corresponda con el objetivo que nos hemos planteado y a la vez cumpla las expectativas de quienes nos sigan en las redes sociales.
Y a partir de este punto, deberemos analizar si todo está funcionando como debe. Es decir, si cumplimos los objetivos que nos hemos planteado. A partir de ahí deberemos estudiar si tenemos que modificar algo o si debemos continuar haciendo nuestro trabajo como lo estamos haciendo. Y solo resta no abandonar en la tarea, cosa que se logrará solo si hemos realizado una adecuada planificación. Y es que no hay nada peor que encontrarse con un perfil sin actualizar desde hace meses… así pues, actúa correctamente o mejor déjalo para otro momento, las redes sociales pueden ayudarte pero solo si lo haces adecuadamente.