La tecnología siempre ha demostrado correr a un ritmo vertiginoso, aunque hasta hace relativamente poco los sistemas operativos parecían mantenerse ligeramente al margen de dicho frenesí. Sin embargo, parece que los tiempos han cambiado, y paulatinamente los sistemas operativos han ido teniendo que adoptar estrategias para mantenerse. Apple ha incrementado el ritmo de actualizaciones de OSX, Microsoft prevee planes de actualizaciones más frecuentes con Windows Blue y ahora surgen propuestas para que Ubuntu se convierte en una distribución rolling release.
La propuesta partio de Rick Spencer (aunque ya se plantease en otras ocasiones también, ahora cobra más fuerza de la mano de este director de ingeniería de Canonical) y ha despertado gran interés. De esta forma se cotinuaría con las versiones LTS de la misma forma, pero se dejarían de lado los lanzamientos semestrales en favor de dicha versión rolling release con actualizaciones más continuadas y previsiblemente una gran actualización mensual.
De esta forma los usuarios siempre tendrían las versiones más actualizadas del software estable y quienes busquen estabilidad seguirán contando con el soporte extendido. Por otro lado, no solo los usuarios se berían beneficiados de este nuevo sistema de lanzamiento de actualizaciones, sino que los desarrolladores también se librarían del trabajo de prepara los lanzamientos cada seis meses. Aún así hay quienes no están del todo de acuerdo con esta propuesta, ya que argumentan que no es un cambio de modelo simplemente, sino que hay que hacer una puesta en práctica real de este sistema y eso tiene ciertos requisitos, especialmente teniendo en cuenta la calidad y la estabilidad.
Lo que está claro, es que estos grandes monstruos de piedra que eran los Sistemas Operativos han oido la pequeña vocecilla y ahora saben que necesitan adaptarse a un entorno muy cambiante, y puede ser que quien mejor lo haga salga airoso. Apple lleva cierta ventaja, Microsoft esta preparando algo en este sentido y ¿Ubuntu? ¿Que camino seguirá?