Estos días pasados se publico en diferentes medios la noticia de que Google nos rastrea aún incluso cuando desactivamos la ubicación. Algo que no gusta, pero que demuestra que por mucho que no nos guste, nos tienen controlados de mil y una formas.
Casi suena a película y conspiración, pero desde que todos y cada uno de nosotros contamos con uno de estos estupendos y flamantes smartphones que nos acompañan casi a diario, lo cierto es que es algo cada vez más real.
En este caso la polémica ha saltado con Google y su sistema operativo para dispositivos móviles: Android. Así tras una investigación se ha comprobado que Google sigue localizando a los usuarios aun cuando estos han desactivado el historial de ubicaciones.
Así que no, no basta con desactivar en los ajustes de google el historial de ubicaciones. Esto solo sirve para que nuestras ubicaciones no se guarden en el mapa y no podamos consultar que recorrido hemos realizado… pero aún así Google sigue almacenando ubicaciones de nuestro dispositivo.
¿Pero que necesidad tiene Google de tenernos siempre localizados?
Pero a tener montones de servicios o aplicaciones ¿cual es el principal negocio de Google? La publicidad. Y como siempre han venido defendiendo, cuanto más personalizada mejor y más eficiente será (y en consecuencia más beneficios reportará no solo a los anunciantes sino a la propia Google). Y para hacer que esta publicidad sea más personalizada, un elemento clave es la geolocalización.